A/76/231
I. Introducción
1.
En su resolución 74/133, la Asamblea General solicitó a la Representante
Especial del Secretario General para la Cuestión de los Niños y los Conflictos
Armados que siguiera presentando informes, tanto a la Asamblea General como al
Consejo de Derechos Humanos, sobre las actividades emprendidas en cumplimiento
de su mandato, con información sobre los progresos alcanzados y los desafíos que
subsistían en relación con la cuestión de los niños y los conflictos armados. La
solicitud respondía al mandato establecido por la Asamblea en su resolución 51/77,
en la que recomendaba, entre otras cosas, que el titular del mandato procurase que se
tomara mayor conciencia y promoviera la reunión de información acerca de los
sufrimientos de los niños afectados por los conflictos armados y fomentara la
cooperación internacional para asegurar el respeto de los derechos de los niños .
2.
En consonancia con ese mandato, y de conformidad con lo solicitado por la
Asamblea General en su resolución 74/133, en el presente informe la Representante
Especial suministra información sobre las tendencias, los nuevos problemas y los
desafíos relativos a los niños afectados por los conflictos armados. También destaca
la interacción continua con las partes en conflicto para hacer cesar y prevenir las
violaciones graves, así como las iniciativas emprendidas con una amplia gama de
agentes para aumentar la conciencia mundial y catalizar la adopción de medidas sobre
la cuestión. Además, explica cómo la pandemia de enfermedad por coronavirus
(COVID-19) ha repercutido en su labor y en el cese y la prevención de las violaciones
graves contra los niños.
II. Panorama general de las tendencias, los nuevos
problemas y los desafíos
A.
Tendencias de las violaciones graves
3.
En 2020, las Naciones Unidas verificaron un total de 26.425 violaciones graves
contra los niños, de las cuales 2.479 se habían cometido con anterioridad pero solo
fueron verificadas en 2020. En total, 19.379 niños y niñas (14.097 niños, 4.993 niñas
y 289 cuyo sexo se desconoce) fueron víctimas o supervivientes de al menos una de
las cuatro violaciones graves que afectan personalmente a los niños: reclutamiento y
utilización, muerte y mutilación, violación y otras formas de violencia sexual, y
secuestro.
4.
En 2020, el reclutamiento y la utilización, y la muerte y la mutilación de niños,
seguidos de cerca por la denegación de acceso humanitario y el secuestro de niños,
continuaron siendo las violaciones verificadas en mayor número. Un total de 8.521
niños fueron reclutados y utilizados por partes en conflicto, y las cifras más elevadas
se verificaron en la República Democrática del Congo, Somalia, la República Árabe
Siria y Myanmar. Más de 8.400 niños murieron o quedaron mutilados, y los conflictos
en el Afganistán, la República Árabe Siria, el Yemen y Somalia fueron los más
mortíferos para ellos. Los niños se vieron especialmente afectados por las armas
explosivas y los restos de guerra, incluidos los artefactos explosivos improvisados,
las minas terrestres y las bombas, que causaron una cuarta parte de las bajas civiles
entre los niños y las niñas. Por ejemplo, en el Iraq, en zonas antes controladas por el
Estado Islámico en el Iraq y el Levante (EIIL), los niños resultaron perjudicados por
la contaminación sin precedentes por restos explosivos de guerra. En Sudán del Sur,
hubo niños que murieron o quedaron mutilados por jugar con explosivos colocados
en las tierras de pasto. Con frecuencia, los niños supervivientes se encontraron con
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