Profundamente preocupada además porque la mutilación genital femenina vulnera y menoscaba el goce pleno de los derechos humanos de las mujeres y las niñas y es una práctica perjudicial, irreparable e irreversible que al día de hoy afecta a entre 100 y 140 millones de mujeres y niñas vivas, y por el hecho de que cada año más de 3 millones de niñas corren el riesgo de ser sometidas a esa intervención perjudicial,