A/RES/71/9
La situación en el Afganistán
Reiterando la necesidad urgente de hacer frente a los desafíos que afronta el
Afganistán, en particular las actividades extremistas violentas que siguen llevando a
cabo en la región los talibanes, incluida la Red Haqqani, Al -Qaida y otros grupos y
delincuentes violentos y extremistas, incluidos los que intervienen en el comercio de
estupefacientes, el desarrollo de las instituciones del Gobierno del Afganistán,
incluso en el nivel subnacional, el fortalecimiento del estado de derecho y los
procesos democráticos, la lucha contra la corrupción, la continuación de la reforma
del sector de la justicia, la promoción del proceso de paz, sin perjuicio del
cumplimiento de las medidas aprobadas por el Consejo de Seguridad en sus
resoluciones 1267 (1999), de 15 de octubre de 1999, 1988 (2011) y 1989 (2011), de
17 de junio de 2011, 2082 (2012) y 2083 (2012), de 17 de diciembre de 2012,
2160 (2014) y 2161 (2014), de 17 de junio de 2014, 2253 (2015), de 17 de
diciembre de 2015, y 2255 (2015), de 21 de diciembre de 2015, y las demás
resoluciones pertinentes, la implantación de un proceso de justicia de transición
dirigido por los propios afganos, el regreso seguro y voluntario de los refugiados y
desplazados internos afganos de forma ordenada y digna, la promoción y protección
de los derechos humanos, la tolerancia interconfesional e intraconfesional, y el
impulso del desarrollo económico y social,
Expresando grave preocupación por el peligro que representan la presencia y
las actividades de asociados del Estado Islámico en el Iraq y el Levante (EIIL)
(Daesh) en el Afganistán, y por sus actos brutales, incluida la matanza de
ciudadanos afganos,
Expresando su profunda preocupación por el continuo y elevado nivel de
violencia existente en el Afganistán, especialmente por el número de víctimas
civiles, condenando en los términos más enérgicos todos los actos terroristas y todos
los ataques violentos, recordando que los talibanes, Al-Qaida y otros grupos
violentos y extremistas y grupos armados ilegales son responsables de la gran
mayoría de las víctimas civiles que se han producido en el Afganistán, y pidiendo
que se cumplan el derecho internacional humanitario y el derecho internacio nal de
los derechos humanos, según proceda, y que se adopten todas las medidas
pertinentes para asegurar la protección de los civiles, los trabajadores humanitarios
y las instalaciones humanitarias y de ayuda,
Acogiendo con beneplácito los logros del Gobierno de Unidad Nacional en
materia de reformas políticas, económicas, sociales y de gobernanza y gestión de la
transición, subrayando la necesidad de preservar los logros alcanzados, e instando a
que se hagan nuevas mejoras en este sentido, en particular p ara hacer frente a la
pobreza y prestar servicios, estimular el crecimiento económico, crear
oportunidades de empleo, aumentar los ingresos internos y promover los derechos
humanos, especialmente los derechos de las mujeres y de las personas
pertenecientes a minorías,
Poniendo de relieve el papel fundamental e imparcial que desempeñan las
Naciones Unidas en la promoción de la paz y la estabilidad en el Afganistán,
expresando su reconocimiento por todas las gestiones del Secretario General y su
Representante Especial para el Afganistán a este respecto y su firme apoyo a dichas
gestiones, expresando su reconocimiento también por la labor que realiza la Misión
de Asistencia de las Naciones Unidas en el Afganistán de conformidad con la
resolución 2274 (2016) del Consejo de Seguridad, y destacando la importante
función de la Misión de Asistencia en la búsqueda de niveles aun mayores de
coherencia y coordinación en las actividades civiles internacionales, guiad a por el
principio de que se deben reforzar la titularidad y el liderazgo afganos,
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